Michelle Wu, la alcaldesa de Boston que lidera la resistencia a la política migratoria de Trump.

Michelle Wu, la alcaldesa de Boston, se ha convertido en la principal defensora de la ciudad contra las políticas migratorias del gobierno de Donald Trump. Con 40 años, Wu, hija de inmigrantes taiwaneses, ha tomado una postura firme contra las medidas que buscan restringir los derechos de los migrantes, una postura que la ha colocado en conflicto directo con el gobierno federal.

En un reciente discurso, Wu cuestionó las políticas del gobierno de Trump, afirmando que Estados Unidos enfrenta un momento de crisis sobre el respeto al estado de derecho y la democracia. En su mensaje, expresó que Boston no se dejaría intimidar y seguiría luchando contra la “matonería” del gobierno federal.

El debate en Boston se centra en la decisión de Wu de limitar la colaboración de las autoridades locales con los agentes migratorios a solo aquellos casos que cuenten con una orden judicial. Esta postura ha generado duras críticas desde el gobierno de Trump, especialmente por parte de Tom Homan, exzar de la frontera, quien prometió “llevar el infierno a Boston” y acusó a Wu de desafiar las leyes federales.

El arresto de la estudiante turca Rümeysa Öztürk por parte de agentes de inmigración, que ocurrió en plena calle, provocó gran indignación en la ciudad. Las imágenes del arresto se difundieron rápidamente en redes sociales, lo que intensificó el temor en la comunidad local. Durante las protestas que siguieron, Wu destacó que el caso de Öztürk era parte de una lucha más grande por la libertad y el debido proceso, valores que, según ella, están siendo violados por la administración de Trump.

A pesar de las críticas y amenazas, Wu ha defendido su postura en diversos foros, incluida una audiencia en la Cámara de Representantes sobre las “ciudades santuario”, que son aquellas que limitan la cooperación con agentes migratorios en casos de personas sin cargos criminales. Wu afirmó que Boston tiene derecho a proteger a sus ciudadanos y que la inmigración es responsabilidad del gobierno federal, no de las autoridades locales.

El conflicto entre Wu y la administración Trump no solo ha generado tensiones políticas, sino también enfrentamientos con otros políticos, como la representante republicana Anna Paulina Luna, quien pidió una investigación criminal contra la alcaldesa por sus acciones.

En su discurso sobre el estado de la ciudad, Wu reafirmó su compromiso con los principios de justicia y libertad. Con un fuerte apoyo de los residentes de Boston, la alcaldesa dejó claro que la ciudad no se dejaría intimidar, y que seguiría defendiendo a los inmigrantes y los derechos fundamentales de todos sus habitantes, sin importar su estatus migratorio.