Katy Perry regresa del espacio junto a cinco mujeres en histórica misión totalmente femenina.

La cantante Katy Perry formó parte de un grupo de seis mujeres que viajaron al espacio este lunes en una misión de 11 minutos, marcando el primer vuelo espacial tripulado solo por mujeres desde 1963.

La tripulación de la misión NS-31 incluyó, además de la estrella pop de 40 años, a la activista Amanda Nguyen, la presentadora de televisión Gayle King, la cineasta Kerianne Flynn, la ingeniera aeroespacial Aisha Bowe y la periodista Lauren Sánchez, pareja del empresario Jeff Bezos, fundador de Blue Origin, la empresa responsable del lanzamiento.

El vuelo, realizado a bordo del cohete reutilizable New Shepard, despegó desde Texas alrededor de las 8:30 a.m. (hora local). Durante los momentos en gravedad cero, Perry cantó What a Wonderful World, mientras las pasajeras flotaban dentro de la cápsula.

A su regreso, Katy Perry expresó sentirse “profundamente conectada con la vida” y calificó la experiencia como una “entrega total a lo desconocido”. Otras integrantes también compartieron su emoción, destacando la calma que transmite la Tierra vista desde el espacio.

Esta misión representa la primera vez desde 1963 —cuando la cosmonauta soviética Valentina Tereshkova voló en solitario— que una tripulación femenina realiza un vuelo espacial completo.

El lanzamiento y aterrizaje se desarrollaron sin contratiempos. Las viajeras superaron la línea de Kármán, ubicada a 100 kilómetros de altura, lo que define el límite oficial entre la atmósfera terrestre y el espacio.

Las imágenes del retorno mostraron a una emocionada Katy Perry besando el suelo, mientras sostenía una margarita en alusión a su hija Daisy (margarita en inglés). Lauren Sánchez abrazó a Jeff Bezos al descender de la cápsula, y Kerianne Flynn calificó la experiencia como la “más emocionante de su vida”.

Aunque la misión fue celebrada como un hito para el turismo espacial, algunos expertos, como el Dr. Kai-Uwe Schrogl de la Agencia Espacial Europea, manifestaron cierta preocupación. Según él, estos viajes pueden opacar el trabajo científico, ya que las celebridades atraen más atención que los astronautas profesionales.

La misión NS-31 representa un nuevo paso para Blue Origin, que ya ha completado más de una decena de vuelos suborbitales, y sigue posicionándose en la emergente industria del turismo espacial.